sábado, 19 de septiembre de 2009

Pérdidas valiosas

Dios !!! que tristeza tan inmensa se siente, ante la partida final de alguno de nuestros seres queridos, es inevitable el llorar, el sufrir, el sentirse mal,  aún cuando todos sepamos que es algo inevitable, y totalmente predecible, porque el morir es lo más seguro que tenemos en nuestras vidas, nosotros nunca podremos adivinar lo  que nos vá a ocurrir en la vida, cual será  nuestro futuro,  quién vá a ser nuestra pareja, ni el número de hijos que vamos a tener, pero lo que si podemos asegurar con toda exactitud, es  que en algún momento de nuestra existencia vamos a abandonar este mundo, sin embargo aún sabiéndolo, nunca deja de caernos por sorpresa, siempre nos toma desprevenidos,  nos causa una pena inmensa, indescriptible, y quedamos atónitos, y nos preguntamos ¿ porqué Dios mio tiene que ocurrirnos esta desgracia? ¿que hicimos para merecerlo? en fin... ante  la inexorable muerte, jamás estaremos lo suficientemente preparados..!!, sin embargo siempre existe un consuelo, ya que  Nuestro Señor en su inagotable bondad, nos  concede  la bendita resignación, para que con el transcurrir del tiempo, nos sintamos mejor, mas tranquilos y poco a poco , pasado un tiempo, seguimos recordando a nuestro ser querido con amor, pero más serenamente, evocándolo en sus momentos felices, y hasta sonreimos  recordando los momentos buenos que pasamos juntos... esa es la ley de  vida, unos mueren para que otros puedan nacer....

No hay comentarios:

Publicar un comentario